sábado, 11 de mayo de 2013

Reyhanli: otra provocación terrorista

Dos coches bomba estallan en un pueblo turco, fronterizo con Siria.
Es una masácre civil como todos los actos terroristas de ese estilo.
Mueren muchos civiles.
La prensa atlantista inmediatamente se inflama. Es Turquía, y es un pueblo cerca de Siria, con lo cual, todos a voz en grito acusan sin pruebas ( nada nuevo) al gobierno sirio.
TODOS.





Ah, pero lo que nadie cuenta, es que esa población, aunque en turquía, es de mayoría Alawita, y por ello a favor del gobierno sirio.
Un detalle que a muchos se les escapa intencionadamente.
Pero el mensaje es que está lleno de refugiados Sirios.
Eufemismo maquiavélico.
Seguro que hay refugiados sirios. Pero otra cosa es que los locales sean turcos alawitas.
Ahí está el engaño.
Sin ese detalle, lógicamente el discurso es coherente, pero añadiéndolo a la receta, hay cosas que no tienen lógica.
Porque el gobierno Sirio querría´poner bombas en una población afín?
Eso, dando por sentado según muchos que el gobierno sirio se dedica a poner bombas por doquier matando a civiles, aún sin saber con qué fin.
No tiene ni pies ni cabeza.
Facilitarle el juego a la OTAN no creo. Ya dije que no son tan tontos.
Suicidarse? sabiendo que eso va en su contra? Tampoco.
Entonces la lógica, si es que la hay en la locura guerrera es otra.

Todos los informes, salvo Al-jazeera claro ( que es la voz de los que pagan esta guerra), indican que la situación de los terroristas hace ya tiempo es insostenible y están cayendo como chinches.
A cientos por día.
En todos los sectores donde están operando en Siria, el ejército sirio les está masacrando.
El armamento, explosivos, y demás utillaje militar, en muchos casos puntero, se transfiere a las milicias locales que apoyan al ejército.
En definitiva, aunque la solución no esté al caer pronto, la situación es desesperada para los terroristas.
Los suministros no llegan. La moral está más que baja. El ejército lleva la iniciativa. Y lo que el imperio pensó que sería un paseo militar como en Libia, se está tornando en una pesadilla en todos los ámbitos: políticos, económicos y sociales.

Queda provocar y provocar a ver qué ocurre: ataques sionistas, terrorismo en el Golán secuestrando a los pobres cascos azules, y que de inmediato fuerzan su salida, con la consecuente impunidad y permeabilidad de esa frontera, coches bomba allá dónde puedan.
Incluso en Turquía a ver si Erdogan consigue que sus amigos de la OTAN le ayuden.
Ya está en ello.(actualizaciones)

El tiempo dirá en qué quedan estas trampas.