martes, 13 de enero de 2015

Atentado en París contra el semanario satírico Charlie Hebdo


Por Red Voltaire



Al menos 3 individuos armados irrumpieron, el 7 de enero de 2015, en los locales de semanario satírico francés Charlie Hebdo, donde abrieron fuego contra miembros del equipo de la publicación al grito de «¡Allah Akbar!».

Por el momento se reportan 12 muertos y una decena de heridos, 4 de ellos en estado grave.

Este atentado pudiera provocar una grave fractura entre musulmanes y no musulmanes en el seno de la sociedad francesa ya que, en el pasado, los musulmanes de Francia se sintieron insultados en varias ocasiones por este semanario satírico y ahora se reporta que los ejecutores del atentado se identificaron como defensores del islam.

La prensa francesa ya está denunciando este acto de violencia como un atentado islámico, basándose únicamente en los gritos de los asesinos, que hasta ahora no han sido correctamente identificados.

Los miembros del comando hablaban en francés y reconocieron rápidamente a los miembros de la redacción de la publicación satírica.

Oficialmente, el semanario francés Charlie Hebdo fue creado en 1992 por el periodista Philippe Val, los dibujantes Gébé y Cabu y el cantante Renaud. Lo que nunca se dice es que fue financiado en secreto por el entonces presidente de Francia Francois Mitterrand con sumas provenientes de los fondos secretos de la presidencia de la República.




Charlie Hebdo fue administrador de la Red Voltaire, de la que se retiró en 1997 por estar en desacuerdo con la asociación. El semanario satírico militaba entonces por la ilegalización del partido de extrema derecha Frente Nacional (FN) mientras que laRed Voltaire defendía el derecho de asociación del FN pero reclamaba la prohibición de su rama armada, conocida bajo las siglas DPS [1]. Las relaciones empeoraron posteriormente cuandoCharlie Hebdo atribuyó los atentados del 11 de septiembre de 2001 a al-Qaeda mientras que la Red Voltaire demostraba la inconsistencia de la versión oficial sobre esos hechos y acusaba a una facción del grupo de presión militaro-industrial de Estados Unidos. Finalmente, en 2007, el director de Charlie Hebdo se acercaba al entonces presidente de Francia Nicolas Sarkozy mientras este último ordenaba la eliminación del presidente de la Red Voltaire, quien se vio obligado a exilarse.